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sábado, 2 de septiembre de 2017

Pablo de Tarso
EL AGUIJÓN EN LA CARNE 


Cuando Dios no remueve el aguijón es porque Él está obrando. Cuando la adversidad, la aflicción y el dolor perduran, debemos confiar que él no es ajeno a nuestra circunstancias. DIOS es soberano y rey sobre nuestras dificultades, establece sus límites y los usa para nuestro provecho. Podemos descansar en que su perfecta y bendita voluntad se está cumpliendo y que eso es lo mejor para nosotros!!!

No hay certeza  de cual era el aguijón en la carne de Pablo la biblia no lo dice, con exactitud. Pablo tuvo muchas experiencias dolorosas, entre ellas se dice , una enfermedad crónica a la que se refirió como: “un aguijón en la carne”.
Se han ofrecido incontables explicaciones concernientes a la naturaleza del aguijón de Pablo en la carne. Éstas van del rango desde una tentación incesante, inflexibles oponentes, enfermedades crónicas (tales como problemas oculares, malaria, migrañas y epilepsia), hasta inhabilidad para hablar. Nadie puede decir con seguridad que es lo que era, pero es probable que fuera una afección física.
Le pidió al Señor tres veces que se la quitara pero Él no quiso hacerlo.
En lugar de eso, le dijo a Pablo: 
“Bástate mi gracia”
 Mi gracia es suficiente para ti. Mi amor y misericordia te permitirán seguir adelante.
En el momento en que lo necesite, su gracia será suficiente para usted. Pero no recibirá esa gracia hasta ese momento.
 El Señor también le dijo a Pablo: “mi poder se perfecciona en [tu] debilidad”. ¿Qué significa eso?
 Significa que, cuando atraviesa los tipos de pruebas en la vida que sencillamente no puede solucionar, usted se hace más dependiente de la fortaleza de Dios y no depende de la suya.
Lo que sí sabemos acerca de este aguijón en la carne, proviene del mismo  Pablo en:                       2Corintios 12:7
 “Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera.” 
Primeramente, su propósito era el de mantener a Pablo en humildad. Cualquiera que haya tenido un encuentro con Jesús y le haya hablado y haya sido comisionado por Él podría, en su estado natural, volverse “ engreído” por este increíble encuentro. Aumenta a eso la experiencia que tuvo de ser movido por el Espíritu Santo para escribir las palabras exactas de mucho del Nuevo Testamento, y es fácil ver cómo podría haberse vuelto “altivo” o “exaltarse demasiado” o “demasiado orgulloso”. Segundo, sabemos que la aflicción vino de o mediante un mensajero de Satanás. Así como Dios permitió que Satanás atormentara a Job (Job 1:1-12), Dios permitió a Satanás atormentar a Pablo para los propios buenos propósitos de Dios y siempre dentro de Su perfecta voluntad.
Es entendible  que Pablo considerara a este aguijón un obstáculo para un ministerio más amplio y efectivo .Pero él aprendió de esta experiencia la lección que domina esta carta: el poder divino se muestra más intensamente sobre el trasfondo de la debilidad humana  para que la alabanza sea solo de Dios                                                    (2 Corintios 10:17)-18)
 17 Mas el que se gloría, gloríese en el Señor;
18 porque no es aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquel a quien Dios alaba.
 En vez de quitarle el problema, Dios le dio la gracia y la fortaleza en él y a través de él, declarándole que Su gracia sería “suficiente.

Esa tormenta que fue enviada para destruirte es la misma que DIOS usara para fortalecerte y mostrar su gloria en tu vida!!!
AMEN!

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